La lucha por ser competitivo en el ámbito profesional y de los negocios, exige que todo profesional deba tener dotes de buen negociador.  Pero, negociar no siempre se relaciona con ventas o compras, muy por el contrario, se evidenciará que el papel de negociador es una habilidad que permite identificar posibles conflictos, los cuales se dan como resultado de una mala comunicación, diferencias en intereses o valores, opiniones divergentes, entre otros.

En un mundo competitivo como el actual, el incorporar la negociación como una habilidad directiva te va a permitir desarrollarte y abrirte puertas dentro del ámbito profesional. En este sentido, los directivos de una empresa deben desarrollar esta habilidad de negociación que, además, les va a permitir detectar los posibles conflictos y a gestionarlos eficazmente, con la finalidad de dar solución a los posibles inconvenientes que se presenten a nivel gerencial.

La habilidad de negociar debe cultivarse como una característica obligatoria para cualquier profesional, ya que viabiliza la forma de comunicación y permite que asertivamente se expresen nuestros intereses; el identificar los elementos que son parte del conflicto, el proceso que se va a seguir, las estrategias para negociar y dar concesiones, deberán orientar hacia una solución positiva, que potenciarán en el individuo la capacidad de generar estrategias para enfrentar procesos de negociación de una manera creativa, generando resultados favorables en cualquier ámbito para alcanzar el objetivo de “ganar – ganar”.

En este curso vas a descubrir cómo gestionar y potenciar todas estas habilidades, destacando principalmente las siguientes: El liderazgo y los estilos de dirección, la gestión del cambio, la gestión del conflicto, la gestión de la comunicación, la gestión de reuniones, las técnicas de negociación y la gestión del tiempo y del estrés.

*La matrícula tiene una duración de 180 días desde el día en que se dio de alta en el curso.